martes, 30 de septiembre de 2008

Los niños de Charlot

Las dos próximas semanas las pasaré en un campamento de cine para chavales. La iniciativa es de un buen amigo y brillante guionista y, si va como esperamos, los chicos aprenderán algo más sobre el cine y, por la misma razón, sobre ellos mismos. Ya una vez hice algo parecido en un colegio de los buenos, de los listos, de esos sin catequesis... Y sí. Que aquél era un buen colegio se notaba por cómo eran los niños: alegres, despiertos, vivos... Yo tuve la suerte de trabajar con ellos. Y el resultado fue esto:

(Que conste que no lo cuelgo aquí para apaciguar mi ego, sino para que todos podáis disfrutar de lo que podríamos considerar ya una de las 100 obras maestras de la cinematografía mundial)

3 comentarios:

pablo aramendi dijo...

A las niñas tienes intención de respetarlas, ¿verdad?

El hombre verde del este dijo...

Hombre, tú sabes que lo que es "la intención" siempre la tengo. Pero la vida es tan impredecible como el brillante final de Los Serrano.

Anónimo dijo...

Y cómo fue el campamento? Pensais repetir? ojalá triunfarais! Creo que es muuuy interesante. Cambiar la pasividad del espectador a un lugar mucho más activo y con criterio propio (muchos mayores no llegan) Es justo lo que necesitan. Genial.